El círculo mágico

El círculo mágico es algo que se traza a nuestro alrededor para protegernos de la negatividad y para crear un lugar sagrado en el  que llevar a cabo los rituales y consagrar las herramientas que vayamos a utilizar.

Normalmente se traza con el athame,  una daga ceremonial de mango negro y doble filo.  No se usa para cortar, es símplemente simbólico, dirige nuestra energía en la dirección que queramos, en este caso para trazar el círculo sagrado.  En caso de no disponer de athame, usaremos el dedo índice de nuestra mano derecha, o izquierda si somos zurdos.

El círculo mágico se utiliza en festividades wiccanas, cuando vamos a realizar un hechizo o para limpiar el ambiente y poder meditar o relajarnos.  No es algo que deba trazarse siempre en el suelo, puede trazarse en el aire, a nuestro alrededor, visualizándolo en nuestra mente.  Debemos disponer de todos los elementos que utilizaremos en su interior, para no romperlo durante la ceremonia.  Necesitaremos cerillas, velas, a ser posible velas pequeñas de té porque se necesitarán varias y de colores diversos y sería peligroso e incómodo usar velas altas, incienso, un bol con agua y un poco de sal y un athame en caso de disponer de él.  Si tenemos un pentáculo también sería bueno instalarlo en el interior del círculo.

Para empezar, utilizando el athame o el dedo índice, trazamos un círculo a nuestro alrededor empezando por el este y terminando en él, en dirección contraria a las agujas del reloj.  A la vez que giramos pedimos la presencia y la protección del dios y la diosa wiccanos.  Hay muchas frases para pedir la protección y presencia de los dioses y los elementos, pero lo mejor es expresarlo con las propias palabras ya que simbolizará mejor nuestros sentimientos y le infundiremos más energía.  Encendemos una vela blanca o roja que será la vela de la presencia.  

A continuación mojamos la punta del athame o el dedo índice en el agua con una pizca de sal y trazamos otro círculo en la misma dirección para pedir que nada que no haya sido llamado entre en el círculo.

Pedimos la bendición del fuego a la vez que encendemos el incienso.  Cogemos el incienso y recorremos el círculo pidiendo la ayuda del elemento aire.

Pedimos la ayuda de los guardianes.  En caso de disponer de velas de colores las iremos encendiendo.

Pedir la presencia del guardián del este, el elemento aire.  Encender una vela amarilla.

Pedir la presencia del guardián del norte, el elemento fuego.  Encender una vela roja.

Pedir la presencia del guardián del oeste, el elemento agua.  Encender una vela azul.

Pedir la presencia del guardián del sur, el elemento tierra.  Encender una vela verde.

Invitamos al dios y a la diosa al círculo encendiendo una vela por cada uno.

El círculo está formado y representa un espacio sagrado en el que realizar nuestros rituales o celebraciones.  

Una vez a cumplido su función hay que despedir a los guardianes de los elementos empezando por el sur y en sentido de las agujas del reloj apagando las velas que los simbolizan y al dios y la diosa agradeciéndoles su ayuda y protección y deseando su presencia en futuras ocasiones.  Después de esto ya se puede salir del círculo.

Esta sería la versión completa del trazado del círculo.  En caso de querer meditar o no disponer de tantos elementos y tiempo, siempre se puede realizar una versión reducida del mismo sin olvidar que las presencias de los guardianes y los dioses son indispensables.

Ritual de protección y limpieza

Este ritual se utiliza cuando nos mudamos a una casa nueva, tenemos una racha de mala suerte, sentimos energías o presencias extrañas o cuando notamos mucha energía negativa acumulada en el ambiente.  Esto último se comprueba cuando te sientes cansado sin motivo, tienes constantes dolores de cabeza en casa o no puedes dormir bien.

Necesitaremos plantas o incienso de alguno de estos, de mejor a peor elección; salvia, romero, cedro, mirra, lavanda, incienso o jazmín. Lo ideal sería salvia y romero.  También necesitaremos una vela blanca o una negra si nos sentimos a gusto con ella y queremos aprovechar sus propiedades de absorber la energía negativa.  Si usamos una vela negra hay que tener cuidado de no hacer este ritual en luna creciente, pues no absorbería nada.  Igualmente, tanto si se usa una vela como la otra es mejor hacerlo en luna menguante ya que lo que queremos es alejar energías negativas.  Si tenemos una ramita de canela en casa iría bien hervirla en un cazo con un poquito de agua.

Para empezar, pide la ayuda o protección de las fuerzas de la naturaleza, el dios y la diosa wiccanos o aquel en quien creas.  Pero sobretodo debe ser alguien en quien creas de verdad.  Si no se te ocurre quien o no tienes una creencia formada, siempre puedes pedir ayuda a los elementos de la naturaleza, ya que vas a usar sus plantas para purificar tu hogar.   Primero encendemos la vela blanca o negra en un lugar de la casa que sea especial para ti, en el que te sientas protegido o relajado, siempre teniendo cuidado de no dejarla en ningún lugar peligroso en el que se pueda quemar algo o ser golpeada y tirada por alguien.

Haz un sahumerio, quemando las hojas de salvia o romero y dejando que echen humo o enciende los inciensos que vayas a usar.  Pasea por la casa con ellos en sentido contrario a las agujas del reloj, parándote en cada estancia y pidiendo la ayuda y protección de tus dioses para alejar las energías o presencias negativas.  Cuando termines, deja los inciensos cerca de la vela hasta que se consuman totalmente.

Deja pasar unos minutos sintiendo el olor de los inciensos inundar tu hogar.  Cuando el aroma se haya suavizado, coge la infusión de canela que habías preparado y que debería estar caliente aun para que desprenda olor, y vuelve a pasear por la casa repitiendo el proceso.  Déjala después con todo lo demás. 

Con todo esto tu casa debería quedar libre de energías negativas y te sentirás más relajado y seguro en ella.  De vez en cuando se puede repetir el proceso.

Los beneficios del té

El té es una bebida con muchos beneficios desconocidos para la salud.  Hay muchas variedades, pero todas provienen de la misma planta, la camelia sinensis, originaria de china.  Según el tratamiento que se le haga después de recogerlo, será de un tipo u otro.

Hay cuatro tipos fundamentales; té negro, rojo, verde y blanco.

El té negro es el té normal, el que te sirven si pides un té sin especificar.  Es el que se oxida y fermenta más tiempo.  Tiene muchos taninos, con propiedades astringentes y antiinflamatorias.  También es el que tiene más teína, por lo que es el más estimulante.  Pero al haberse oxidado demasiado es el que menos antioxidantes tiene.  Es el que tiene más flavonoides que mejoran la capacidad de dilatación y contracción de los vasos sanguíneos. 

El té verde se oxida menos y por ello tiene más catequinas con propiedades antioxidantes.  Los antioxidantes son sustancias que evitan la oxidación de las células, por lo que las protegen del envejecimiento y son anticancerígenos.  Tiene menos teína que el té negro, por lo que es menos estimulante.

El té rojo es el mismo que el verde pero más fermentado.  Un tipo de bacterias lo fermentan y lo vuelven rojo y con más teína.  Es diurético por lo que evita la retención de líquidos y elimina toxinas.  Al fermentar más tiempo también es efectivo quemando grasas, por lo  que es el más indicado para controlar el colesterol.  Favorece la digestión promoviendo la formación de ácidos gástricos.

El té blanco es el más selecto.  Se obtiene de los brotes tiernos de la planta.  Su precio suele ser más elevado, pero hoy en día es más fácil de encontrar y menos caro.  Es el que menos teína tiene y más efectos antioxidantes, está considerado el mayor antioxidante natural, por lo que tomarlo es muy beneficioso para el organismo.

Cada uno de los cuatro tiene  diferentes variedades, con sabor a jazmín, limón... pero en general sus beneficios son los mismos que del que proceden.

Los chakras

Los chakras son centros energéticos en nuestro cuerpo.  No son físicos, son como el aura, no todo el mundo lo puede ver. Están situados en una linea vertical que cruza centralmente nuestro cuerpo.  Son siete, de arriba a abajo, el chakra de la  corona, del tercer ojo, de la garganta, del corazón, del  plexo solar, del sacro y de la raíz.   Regulan el flujo de energía por nuestro interior.  Su funcionamiento se refleja en las decisiones que tomamos frente a las diferentes situaciones de nuestra vida.  Según como esté cada uno, abierto o cerrado, nos condiciona a la hora de sentir o pensar.  Todos nuestros sentimientos, nuestras experiencias, se dividen en siete categorías y cada una de ellas está asociada a un chakra.  Cuando tu consciencia está tensa es porque hay algo mal en uno de nuestros chakras y esto acaba afectando a nivel físico a nuestro cuerpo.  Si la persona reacciona ante la señal física que se le ofrece, y soluciona el problema todo se vuelve a equilibrar.

Los chakras de la parte superior controlan nuestro estado mental y los de la parte inferior nuestro lado instintivo.  Cuando están abiertos están operativos pero si están semicerrados otros chakras tienen que estar sobre-activos para compensar.

El chakra de la corona se simboliza en color lila o blanco, rige el cerebro, el cráneo y el sistema nervioso.  Se relaciona con la empatía, con la capacidad de sentir lo que sienten los demás.

El del tercer ojo es de color azul oscuro, está relacionado con la nariz, las orejas, los ojos, el cerebelo y la pituitaria.   Con la percepción extra sensorial y la conexión con el subconsciente.

El de la garganta es azul claro, relacionado con la voz, la garganta, los bronquios, la tiroides y la parte superior de los pulmones.  Asociado al sentido del oído, a la expresión de los sentimientos, la expresión artística y la creatividad.

El del corazón es verde.  Rige la parte inferior de los pulmones, la piel, el corazón, las manos, el timo y el sistema circulatorio.   Es el asociado al sentido del tacto, la relación con el propio cuerpo, la sensibilidad y el amor.

El del plexo solar es amarillo.  Dirige el hígado, estómago, páncreas y sistema nervioso vegetativo.  Vinculado al sentido de la vista, es el centro del poder, el control y el sentimiento de ser uno mismo.

El del sacro es naranja.  Asociado a los órganos reproductores, los riñones y el aparato digestivo.  Controla el sentido del gusto, el apetito, el sexo.  Relacionado con lo que el cuerpo quiere y necesita, con el placer.

El de la raíz es rojo.  En contacto directo con la columna vertebral y los huesos en general, las piernas, el intestino y las glándulas suprarrenales.  Con el sentido del olfato.  Relacionado con la seguridad, la supervivencia, el hogar, el trabajo...

La relajación nos ayuda a sentir la circulación de la energía por el cuerpo y a aprender a abrir y cerrar los chakras a voluntad, ya que tampoco es adecuado que todos entén igual.

La luna del lobo

La luna llena de enero se llama luna del lobo, es la luna del invierno más profundo.  El frío y el hambre hacen que muchos animales mueran en el bosque y alimenten al lobo.  Los lobos son animales de manada, con una jerarquía muy estricta.  El lobo alfa es el que manda, el que lidera a sus compañeros, el que les hace sobrevivir al duro invierno.  Los aullidos de los lobos hambrientos se escuchan estas noches más que nunca.

El frío invierno está aquí pero se va alejando poco a poco y es el momento de despertar.  Es tiempo de hacer planes de futuro, de emprender proyectos nuevos.  Es una noche para acercarnos a nuestros familiares, para unir las fuerzas y sobrevivir como hacen los lobos.  Enciende una hoguera, unas velas, escucha sus aulllidos, por medio de una gravación si no te encuentras en la naturaleza, y disfruta del calor del hogar.

El poder de las piedras: Turmalina

Hay turmalinas de todos los colores, desde transparente a negra.  La más usada en la magia es la turmalina negra.  Es la piedra más utilizada como protectora frente a las energías negativas.  Se carga eléctricamente por el calor, la presión o el frío. Antiguamente se utilizaba por su capacidad para atraer las cenizas debido a su carga.  Relaja el sistema nervioso, equilibra las emociones y regenera las células.  Expulsa las energías negativas descargando a las personas de ellas.  Absorbe y transmuta las energías desarmónicas.  Es ideal para tratar la depresión y la tristeza.  Equilibra los chakras.

Hay que llevarla en la parte izquierda del cuerpo para aprovechar todos sus beneficios.  Se usa para limpiar lugares cargados de energía negativa, protege de las radiaciones de los móbiles.   Se la llama la piedra de la verdad pues actua en el tiempo aclarando las cosas conforme pasan los días..

Antes de usarla hay que ponerla en agua con sal durante una noche, aclararla bien después y exponerla al sol un día entero.  De vez en cuando va bien repetir este proceso para ayudarla a descargarse.

El poder de las velas

En todas las religiones, las velas ocupan un lugar privilegiado.  Sirven para hacer realidad nuestros deseos, guían nuestro camino, iluminan nuestros momentos difíciles y sirven para relajarnos.  Su poder es muy grande, pero siempre hay que usarlas sin actitud egoísta y sin ánimo de dañar a nadie. 

Deben encenderse con una cerilla y nunca soplar para apagarla, usar un apagavelas de metal. Se pueden escribir deseos en ellas o introducir un papel con un deseo si son velas enrolladas de cera natural de abejas, o simplemente expresar un deseo al encenderlas.  Hay que intentar que la vela se consuma completamente y no utilizar nunca la misma vela apagada para volver a encender y formular otro deseo.  En los rituales, los colores juegan un papel indispensable.

Las velas rojas simbolizan la pasión, el coraje, la sexualidad, la fuerza y la salud.  Está asociado al planeta marte, activa las emociones primitivas e incontrolables y favorece los esfuerzos violentos.

Las velas blancas, simbolizan la pureza, la sinceridad, la verdad y la inocencia.  Tienen relación con la luna.  Incrementan la fuerza espiritual y la fe.  Aportan paz al alma, ayudan en las reconciliaciones y preservan de los maleficios.  Es el color que sustituye a todos los otros si no los tenemos o no sabemos cual usar.

Las amarillas, representan al planeta mercurio.  Se utilizan para la suerte, el éxito, la riqueza y la popularidad. Es el color del sol y del oro, símbolo de perfección, riqueza, poder y gloria.  Es un color que calienta y exalta.  Eleva el espíritu y favorece el esfuerzo intelectual.

Las violetas, simbolizan la piedad, la sabiduría, la bondad, la meditación y la calma.  Encarnan el sacrificio y la perseverancia.  Es un color tranquilizante que induce al sueño y la relajación.

Las azules garantizan éxito en las empresas, se utilizan para los negocios, para enfrentarse a los juicios y para equilibrar los excesos.  Asimismo, está unido a las emociones, la amistad, el afecto y el amor.  Asociado al agua, calma y sirve para reflexionar.

Las velas rosas simbolizan el amor, el matrimonio, la ternura, la fraternidad, los sentimientos nobles, las relaciones estables y el romanticismo.  Se relaciona con venus, el planeta del amor y la belleza.  Transmite bondad e indulgencia.  Favorece la vida social y las relaciones.

Las verdes son del color de la naturaleza, se asocian con la salud, el crecimiento, la esperanza, la inmortalidad y la juventud eterna.  También con el éxito, el dinero, la felicidad y la abundancia.

Las naranjas, están asociadas al sol como las amarillas.  Representan la curación gracias a su energía regeneradora, la paz y la tranquilidad.  Aumentan el ánimo y estimulan la creatividad y la inteligencia.  Aumentan la constancia.

Las marrones están asociadas a la tierra.  Se utilizan para encontrar solución a los problemas.  Es un color mediador, sutil e intuitivo.  Ayuda a la comprensión y desarrolla la percepción.

Las doradas están relacionadas con el oro y los bienes materiales.  Se utilizan para atraer dinero, fortuna y tener éxito en las actividades financieras.  También para la fecundidad y el dominio.

Las negras siempre se ha creído que simbolizan el mal y la magia negra, y es cierto que también pueden usarse así, pero en buenas manos pueden ser muy útiles.  Es un color que contiene a todos los demás, por lo que se usa para recoger la energía, en especial la energía negativa del entorno.  No hay que encenderla nunca en luna creciente, pues aumentaría su poder negativo y no nos serviría para limpiar el ambiente de esta energía.  Se asocia al planeta saturno.  Se usa para neutralizar los conjuros de magia negra o el mal de ojo, es una vela protectora.

Relatos propios: Los guerreros de obsidiana

Hace mucho tiempo, había un reino conocido por su invencible ejército y por su castillo situado en la cima de una montaña rica en obsidiana.  Sus habitantes vivían en paz, su ejército cuidaba de ellos.  Eran conocidos en todas las tierras de alrededor.  Los hombres que formaban su defensa eran miles, bravos guerreros, inquebrantables en la lucha y completamente fieles a su rey.  Nada podía hacerlos retroceder o hacer temblar su corazón.  Llevaban espadas con hojas de obsidiana terriblemente afiladas y puntas de flecha del mismo material.  Sus armaduras estaban adornadas con incrustaciones de la piedra por la que eran conocidos.  El rey presentaba frecuentes batallas en los alrededores, pues eran muchos los  que querían invadir el castillo debido a su riqueza en obsidiana, una piedra negra muy valorada en aquel lugar.  Pero nadie conseguía nunca vencerles.  

Un día, estando el ejército fuera del castillo, presentando batalla en una tierra cercana, le llegó la noticia al rey de que su hogar estaba siendo atacado.  Las tropas abandonaron raudos la batalla y cabalgaron hacia su reino intentando llegar a tiempo para retomar el castillo.  Al llegar, vieron un espeso humo elevarse desde el interior de las murallas.  Cruzaron las puertas sin pensárselo, dispuestos a combatir a cualquier enemigo.  Pero al entrar en el castillo vieron que éste estaba desierto.  Un gran fuego quemaba una de las torres y se iba extendiendo rápidamente, pero los habitantes debían haber huido, pues no había nadie.  De repente, un golpe a sus espaldas los hizo volverse para ver que alguien había cerrado las puertas tras ellos.  Les habían tendido una trampa y los habían encerrado ahí, indefensos ante las llamas que se iban acercando y devorádolo todo a su paso.  Nada pudieron hacer frente al fuego.  Sus antiguos enemigos habían unido fuerzas  tramando un plan para engañarlos y quemarlos en su propio castillo.  Los habitantes habían huido nada más ver llegar a los invasores y se habían salvado.  Pero para el rey y su ejército ya era tarde.  El incendio lo devoró todo y después se extinguió.  Sus enemigos se adentraron en lo que quedaba de castillo.  Algo los sorprendió desagradablemente, su querida obsidiana, aquella por la que habían luchado durante años, había cambiado.  El intenso calor había hecho que las cenizas de aquellos valientes guerreros quedaran incrustadas en la obsidiana, siendo ahora una piedra negra con manchas grises.  A los invasores no les gustó aquel cambio, ya que perdía todo su valor, nadie conocía aquella piedra y no pagarían por ella.  Era como si los guerreros se hubieran llevado con ellos su tesoro dando origen a otra piedra, la obsidiana nevada.

Así que, cuando llevéis una obsidiana nevada con vosotros, recordad que posee el alma de unos valientes guerreros dispuestos a defenderos de cualquier mal, igual que hicieron con su tierra, quedando para siempre en ella.  Sentíos protegidos, pues no os abandonarán ante nada y la fuerza de los guerreros de obsidiana os acompañará siempre.

Imbolc

Imbolc se celebra el 1 o 2 de febrero en el hemisferio norte y el 1 o 2 de agosto en el hemisferio sud.

El invierno va desapareciendo, los días son más largos y se empiezan a ver los primeros brotes en la naturaleza.

Es una festividad asociada a la fertilidad y a santa Brígida o Brighid.  De origen celta, de finales del siglo XIX y principios del XX.  Muy ligada a la lactancia, ya que es en estas fechas cuando las ovejas dan a luz y empiezan a amamantar a sus crías.

Brighid es la diosa del fuego irlandesa, patrona de los sanadores, los herreros y la metalurgia.  Es la protectora de las mujeres, los niños y los animales recién nacidos.  En el cristianismo equivaldría a santa Brigida, matrona de María, y para los católicos a la candelaria, o festividad de la luz.  En Wicca, la diosa da vida de nuevo a la tierra. 

Se celebra desde la víspera hasta el anochecer.  Se encienden faroles en las casas en representación de la luz que ilumina cada vez más tiempo los días.  Se plantan semillas tanto literal como  simbólicamente, poniendo los cimientos de un nuevo objetivo o proyecto.  Se encienden hogueras para honrar a la diosa del fuego.  Puedes pasear una vela por todas las estancias de tu hogar para atraer la luz de nuevo a él.

Los colores representativos de esta festividad son el naranja, el amarillo y el blanco.

Las hierbas e inciensos que se emplean son salvia, caléndula, rosas, diente de león, verbena, mirra, vainilla o canela.

Las piedras utilizadas son todas las blancas o de colores del amarillo al rojizo; cuarzo blanco, citrino, rubí, granate, jaspe rojo...

El poder de las piedras: Cuarzo.

El cuarzo es un mineral compuesto de sílice.  Es uno de los minerales más comunes en la corteza terrestre.  Hay muchas variedades: cristal de roca, cuarzo blanco, café, rosa, ahumado, citrino e incluso la amatista es un tipo de cuarzo.

Es una piedra con grandes propiedades energéticas, por lo que es muy apropiada en casos de pérdida de vitalidad.

Cada tipo de cuarzo posee  unas cualidades propias.  El blanco actúa contra la pérdida de energía, para vencer  la ansiedad, para reducir el estrés y para favorecer la meditación.

El cuarzo rosa se utiliza para atraer el amor.  Para realizar curaciones emocionales y para equilibrar la energía sexual y emocional.

El cuarzo citrino tiene el poder de regenerar en cualquier sentido.  Es purificador, expulsa las energías negativas.  Está relacionado con el éxito y las riquezas.
El cuarzo ahumado ayuda al desarrollo espiritual anclándonos a la tierra para no perder el contacto con la realidad.

Aunque el más utilizado es el cristal de roca, el cuarzo transparente, amplifica la energía del cuerpo y de la mente.  Se usa para la meditación, la limpieza del aura y en rituales de curación.  Canaliza las energías y desbloquea. Las bolas de cristal para predecir el futuro se fabricaban con cristal de roca, aunque resultaban caras y se acabaron usando otros materiales.  Si se posee una esfera de cuarzo es bueno sacarla a la luz de la luna llena para fortalecer sus poderes.

El cuarzo se purifica introduciéndolo en una infusión de salvia durante un día entero.

Para beneficiarnos  de sus efectos se puede sostener en la mano cuando nos encontramos enfermos o llevarlo al cuello en forma de colgante, siempre tocando la piel.  También se puede colocar en las esquinas de una habitación para protegerla de las energías negativas.

Plantas medicinales: Segunda parte.

Tomillo:

El tomillo es un antibiótico natural y uno de los  mejores desinfectantes naturales.  Favorece la digestión, abre el apetito y contiene hierro, por lo que se usa frente a la anemia.

Se utiliza para tratar infecciones de origen respiratorio como por ejemplo las anginas.  Es emenagogo y antirreumático.

Es un tranquilizante natural y levemente sedante.  Se utiliza en cocina sobretodo en la mediterranea.

Mágicamente, sus usos son para proteger la casa, sobretodo de los rayos en caso de tormenta, se cuelga un ramillete en un rincón del hogar.  Quemado se usa para aromatizar y purificar el ambiente.

Ruda:

Su efecto más conocido es sobre el sistema reproductor femenino, iniciando el periodo menstrual, por lo que que se usaba como abortivo.  Hay que evitar tomarla en caso de embarazo.  Disminuye la fertilidad masculina. Es sedante, pero hay que tener cuidado pues es tóxica en grandes cantidades.

Fortifica las arterias.  Su fuerte aroma aleja a los insectos.

Sus propiedades mágicas son las que la hacen más conocida, es una de las plantas más poderosas en ese aspecto.  Es un excelente protector ante cualquier ataque psíquico.  Atrae lo positivo y a las personas adecuadas para nosotros y atenúa la negatividad.  Se utiliza para deshacer hechizos y protegerse de ellos, para realizar exorcismos.   Crea un campo protector alrededor de quien la posea.

Manzanilla:

Su mayor propiedad es digestiva.  Es protectora y reparadora de la mucosa gástrica.  Para tratar el dolor de estómago, las nauseas, el dolor de barriga, los cólicos... Ayuda a disminuir el colesterol.  Tiene propiedades emenagogas.

Se usa en casos de nerviosismo o insomnio.  Es un diurético suave, por lo que va bien para evitar la retención de líquidos.  Es un colirio natural en caso de conjuntivitis u orzuelos.

Sus propiedades mágicas se reducen casi exclusivamente a atraer el dinero y a rituales de purificación.

Menta:

Es una hierba aromática.  Antiinflamatoria, antiséptica, bactericida, expectorante, antiespasmódica y carminativa.  Se usa para los trastornos digestivos y para el colon irritable.  Es anticoagulante por lo que mejora la circulación.

Sus propiedades mágicas son variadas.  Se echa al fuego para alejar a los malos espíritus.  Se utiliza en hechizos de curación, de purificación y de amor.  Se usa como afrodisíaco.  Bajo la almohada puede proporcionar una visión de futuro en los sueños.

Plantas medicinales: Primera parte.

Las plantas tienen gran cantidad de componentes beneficiosos para la salud, la mayoría de los medicamentos aprovechan sus virtudes.  Aquí explicaré las propiedades más características de las que considero imprescindibles en todo jardín. También tienen ciertas propiedades mágicas usándolas solas o mezcladas.

Ajo: 

Es un potente antibiótico, fungicida y antiviral.  Depura la sangre y se utiliza para prevenir enfermedades cardiovasculares ya que reduce la presión arterial.  Es diurético por lo que facilita la eliminación de toxinas y la retención de líquidos.  Previene ciertos tipos de cancer que afectan al sistema digestivo.

En cuanto a sus propiedades mágicas, es un gran protector en general.  Se cuelgan ajos en las ventanas para evitar la intrusión de los espíritus y proteger la casa, bajo la cama protege el sueño del que duerme.  Se usa frente a maldiciones y el mal de ojo.

Salvia:

Fortificante de encías, para el mal aliento y para las llagas de la boca.  Para curar heridas y cicatrizarlas. Es estimulante, vulneraria y bactericida.  Sobretodo se usa en catarros y resfriados.  Tiene propiedades estomacales,antidiarreicas y antivomitivas.

Es emenagogo, se usa para los dolores de la menstruación.  Aumenta la fertilidad masculina.  Es hipoglucemiante, por lo que se usa en casos de diabetes.  Es relajante muscular y se utiliza en dolores producidos por estiramientos indebidos.  Junto con el romero y el tomillo da brillo y vigor al cabello. En cocina es muy apreciada, sobretodo en la cocina mediterranea.

Pasando a sus propiedades mágicas, su nombre viene del latín salvus, es símbolo de salud, vitalidad y longevidad.  Alarga la vida de quien la cuida.  Pero se aconseja que sea otro quien la plante en nuestro jardín, pues sino trae mala suerte ( siempre se puede dejar en la maceta en la que se compró o pedirle a un vecino que nos la trasplante). 

Se utiliza en rituales de curación y para hacer limpieza de energías negativas.  También para atraer el dinero y el éxito en los negocios.

Romero:

Tiene efectos estimulantes y tónicos.  Ayuda en la recuperación de enfermedades respiratorias y digestivas, sobretodo del hígado.  Es emenagogo.  Se usa para tratar la ictericia, para la insuficiencia hepática y para la anemia, debido a la gran cantidad de hierro que tiene.  Es antioxidante, por lo que protege contra el envejecimiento celular, el cancer y ayuda a rebajar el colesterol.  Es bactericida.

Es especialmente bueno para el cabello dándole vitalidad y fuerza, por lo que se aconseja lavarse el pelo con su infusión.

Mágicamente, es considerada una hierba sagrada.  Aleja a los demonios, se quema para purificar y limpiar un lugar.  Da felicidad y dicha, aleja la tristeza.  Conserva la salud y rejuvenece, por lo que es bueno bañarse en su agua.

Lavanda:

Por sus propiedades antiespasmódicas y sedantes se usa como somnifero suave, para tratar trastornos del sueño, nervios de estómago, ansiedad e hipertensión.  Es antiinflamatoria  por lo que se usa frente al dolor.  Es antiséptica y antibacteriana para lavar heridas, quemaduras o enfermedades de la piel como los eccemas, la psoriasis o las picaduras.  También se utiliza frente a la caida del cabello ya que aumenta el riego sanguineo en el cuero cabelludo.  

Ahuyenta los insectos,por lo que se usa para aromatizar armarios, proteger la ropa y alejar las pulgas y otros parásitos de los animales.

Sus propiedades mágicas son sobre todo como relajante y purificadora.  Se utiliza para alcanzar la paz interior.  Para tomar baños relajantes y para proteger el sueño y poder descansar.

Encontrar tu animal de poder.

Un animal de poder es un tótem, un espíritu protector de la naturaleza que está a nuestro lado.  Es un ser con el que debemos relacionarnos y acercarnos poco a poco para que su energía protectora nos ayude en los diferentes momentos de la vida.  No se le puede elegir.  Él es quien nos escoge a nosotros, pero lo podemos buscar.
La relajación nos ayudará a ponernos en contacto con nuestro animal de poder.  Esto no es algo  sencillo, habrá que dedicar varias sesiones de relajación para conseguir resultados.
Primero, escoged un lugar tranquilo, donde no vayáis a ser molestados.  Poneos ropa cómoda, que no os apriete ni moleste de ningún modo.  Apagad las luces, pues es más fácil relajarse en la oscuridad.  Podéis poner algún incienso suave que os ayude, como lavanda,mirra, jazmín o patchuli, aunque eso depende bastante de vosotros, pues a cada uno le tranquiliza más un aroma u otro.  Adoptad una postura cómoda porque podéis estar mucho rato así.  Lo ideal es tumbarse boca arriba.  Cerrad los ojos y prestad atención a vuestra respiración.  Sentid cómo el aire entra e inunda vuestros pulmones.  Notad después cómo sale lentamente.  Seguid el ritmo de la respiración sintiendo cómo llena vuestro cuerpo de energía a la vez que de oxígeno.  Sentid la energía fluir por vuestro  interior, imaginadla como un calor que  se mueve por vuestros brazos, piernas, cabeza... reconfortando vuestro cuerpo y extrayendo el frío de la energía negativa que se había quedado estancada.  Seguid así hasta que os sintáis en calma.  Cuando hayáis llegado a este estado, empezad a imaginar un lugar.  Estáis en algún lugar de la naturaleza que os atraiga, el mar, el bosque, un lago, el pico de una montaña... dejad que esto pase poco a poco, no obliguéis a vuestra mente a ir a ningún sitio, dejad simplemente que aparezca.Cuando estéis ahí, mirad a vuestro alrededor, visualizad cada detalle, cada sensación, ¿es de día, de noche?  Esperad ahí,  relajados, hasta que un animal se os presente delante.  Lo veréis aparecer y acercarse poco a poco a vosotros.  No os mováis ni intentéis ir hacia él, será él quien se acerque si os acepta.  Disfrutad de su compañía y quedáos un rato ahí.

 Finalmente, cuando se vaya, también vosotros podréis iros.  Ved cómo va desapareciendo poco a poco la naturaleza a vuestro alrededor, sentid de nuevo que estáis en vuestra casa.  Empezad a prestar de nuevo atención a vuestro cuerpo, a la energía que fluye por él, a la respiración.  Oled el incienso que habíais puesto y que inunda la habitación.  Empezad a mover poco a poco vuestro cuerpo, las manos, los pies, los brazos,... hasta que estéis completamente despiertos.
Esta técnica de relajación no es fácil de conseguir.  Requiere mucha práctica y es casi seguro que no veréis vuestro animal de poder al primer intento.  Es algo que hay que ir repitiendo y mejorando poco a poco.

Espero que os haya ayudado en la búsqueda y podáis encontrar a vuestro animal de poder.

El poder de las piedras: La amatista

Si hay una piedra conocida y realmente poderosa, ésta es la amatista.

La amatista es una variedad de cuarzo de color violeta. Es el cristal más representativo de la alquimia.  Energizador y transmutador de potencial.
Su nombre viene del griego "amethystos" que significa no borracho, ya que era considerada un potente antídoto contra la embriaguez.  Ayuda a combatir adicciones.  Es limpiadora del aura y estimulante emocional.
Es un cristal que proporciona paz.  Ayuda al sueño alejando el insomnio y las pesadillas.  Llena el aire de vibraciones relajantes, neutralizando las energías negativas y liberando la energía bloqueada.
Es altamente protectora, reduciendo los temores y neutralizando la negatividad.  Influye en ambientes de discordia creando armonía.  Calma las pasiones, la violencia y la rabia.
Es uno de los cristales curativos más poderosos, mejora las defensas y el sistema endocrino.  Se  utiliza contra la depresión ya que consuela frente al dolor y proporciona alivio en momentos de angustia.  Aumenta la capacidad paranormal y la meditación.  Agudiza el sexto sentido.
Es especialmente indicada para los horóscopos de aries y acuario.
Para beneficiarnos de sus virtudes es bueno llevar una amatista en el bolsillo o en contacto con la piel o meditar con una en la mano o cerca de nosotros.  También podemos darnos un baño de amatistas, sumergiendo varias en el agua de la bañera y aprovechando sus propiedades relajantes.

Relatos propios: La leyenda del pentáculo.

Hace mucho tiempo, en una aldea rodeada por un espeso bosque, vivía un grupo de personas en paz  con la naturaleza.  Pocos recordaban desde cuando había estado ahí el poblado.  Vivían de lo que producían respetando la naturaleza y adorándola.  Tenían una profunda creencia en los dioses de los elementos, la tierra, el fuego, el aire... Todo era tranquilo hasta que un día algo pasó.  Los niños empezaron a desaparecer noche tras noche.  Un extraño ser venía al poblado y se los llevaba mientras dormían.  La tristeza y el miedo dominaron el lugar.  No se atrevían a salir de sus casas durante la noche por miedo a ese ser.  Hasta que un día, reuniendo todo su valor, cinco hombres decidieron hacerle frente.
Se encontraron al caer el sol en un claro del bosque y empezaron un ritual, rezando a los dioses de la naturaleza para que los ayudasen.  Era la mejor manera que se les ocurrió de luchar contra un ser sobrenatural ante el que los hombres nada podían hacer.  Mientras realizaban su ritual, apareció el monstruo que tanto los hacía sufrir.  Medía más de dos metros y parecía más hecho de aire que de materia real, era como un espíritu. Apareció en medio de ellos haciéndoles retroceder en un círculo a su alrededor.  El más anciano de los hombres reunió el valor para seguir suplicando en voz alta a sus dioses que le dieran fuerza para sujetar al ser.  Extendió su brazo y de él salió una especie de energía en forma de mano enorme  que aferró al espíritu entre sus dedos.  Vieron cómo su cuerpo se iba volviendo más y más visible, como si se tornara humano.  Sus compañeros, animados por el efecto que habían tenido sus palabras, siguieron su ejemplo.  El segundo hombre se dirigió al elemento agua pidiéndole su ayuda y de repente, una tormenta estalló sobre el ser ahogándolo.  El tercero rogó al aire y un viento huracanado rodeó a su enemigo elevándolo del suelo.  El cuarto rezó al fuego y de la antorcha que portaba salió una llama enorme quemando al horrible ser que aullaba de dolor.   El último hombre dirigió su plegaria a la madre tierra y ésta se abrió a los pies de su enemigo engulliéndolo  en una grieta tan profunda que no parecía tener fin.

Al terminar la batalla, los hombres, agotados, miraron a sus pies y vieron que el suelo, en la superficie que ocupaban, había cambiado de color, dando forma a una estrella de la que ellos eran cada una de las puntas.  A partir de entonces, tomaron esa estrella de cinco puntas como símbolo de protección de sus dioses y la tenían presente en todos sus rituales.  Representando cada punta la fuerza del espíritu, la tierra, el agua, el fuego y el aire.

Nunca más se volvió a ver por aquellas tierras un ser como aquel que las fuerzas de la naturaleza habían logrado derrotar.

El pentáculo

El pentáculo o estrella de cinco puntas rodeada por un círculo, es uno de los símbolos más comunes en la wicca.
Cada punta de la estrella simboliza uno de los cinco elementos.  Espíritu, la punta de arriba.  Agua, arriba a la derecha.  Fuego, abajo a la derecha.  Tierra, abajo a la izquierda.  Y aire, arriba a la izquierda.
Cuando se celebran rituales, cada uno de estos elementos queda representado por un objeto, velas, incienso, arena...
Cada uno tiene un significado.  El espíritu simboliza lo etéreo, lo eterno, las fuerzas divinas y la luz.
El aire simboliza la mente, el pensamiento, el análisis, la inteligencia.  El fuego tiene que ver con la pasión, la energía, el ímpetu.  La tierra la unión con la madre, la seguridad, el crecimiento y el alimento.  Y por último, el agua simboliza las emociones, el amor, la sanación y el ciclo de la vida.
El pentáculo con la punta hacia arriba nos hace ver la supremacía del espíritu.  Con la punta hacia abajo representa la pérdida del poder espiritual, dejándose vencer por el cuerpo  y los deseos.  Los wiccanos representamos la estrella con la punta hacia arriba dando vital importancia al espíritu.  Es un símbolo de protección, el más conocido en la wicca, pero poco a poco os iré presentando otros.

El poder de la luna!

 La influencia de la luna no solo se refiere a su significado en la wicca.  Su efecto se nota a gran escala en las mareas y a pequeña escala en el cambio de humor de las personas las noches de luna llena o de luna nueva y en el ciclo reproductor de los animales, también influidos por ella.  Además, las noches de luna llena es más difícil conciliar el sueño, produce cierto insomnio en muchas personas.
    En cuanto a la wicca, diferenciamos las cuatro fases.  Luna creciente, son las noches ideales para rituales en los que quieras atraer algo hacia ti, fertilidad, salud o crecimiento de algún tipo.  Luna menguante, para rituales de expulsión o de protección frente a las influencias negativas.  Luna llena, son las noches más poderosas, cuando las energías están más presentes y la energía del ritual se intensifica, hay que tener especial cuidado con los hechizos realizados estas noches por su potenciación. Y luna nueva, cuando la luna es un círculo oscuro en el cielo.  La magia esas noches casi no tendrá poder, pero son ideales para entrenar e intensificar los poderes mentales.  Hay wiccanos que por el contrario, prefieren realizar hechizos en luna nueva porque se sienten más unidos a la oscuridad del cielo.
    Cada luna llena del año es una luna especial en wicca, una celebración o Esbat.  Luna fría en enero, luna avivadora en febrero, luna de tormenta en marzo, luna de viento en abril, luna de las flores en mayo, luna del sol fuerte en junio, luna de bendiciones en julio, luna de maíz en agosto, luna de cosecha en septiembre, luna de sangre en octubre, luna de duelo en noviembre y luna de las noches largas en diciembre.  Hay una luna más que se da cuando en un mes hay más de una luna llena, a la segunda se la llamaría luna azul.  Más adelante las iré explicando una a una.
    Así que, a partir de ahora, cuando anochezca, perded unos segundos en mirar al cielo y observar que luna os vigila desde ahí arriba, porque su poder puede hacer cambiar muchas cosas en vuestra vida.

Que es la wicca.

Wicca es una religión neopagana creada por Gerald Gardner en inglaterra durante la primera mitad del siglo XX.  Se podría definir como la magia de la naturaleza. Se basa en la convivencia pacífica con la tierra y la naturaleza.  Es duoteísta, adora a un dios y a una diosa como los dos aspectos femenino y masculino de la vida. La diosa luna y el dios astado, que nada tiene que ver con el demonio, los wiccanos no creemos en el diablo, el único mal en la tierra proviene de los propios hombres y del daño que le hacen a la naturaleza y a ellos mismos.

Creemos en la ley del tres.  Todo lo que hagas te será devuelto por triplicado.  Tanto lo bueno como lo malo.

Las celebraciones de la wicca coinciden con los ciclos lunares o Esbats.  Y con los ciclos solares, celebrando los equinoccios, solsticios... llamados Sabbats.

Wicca se puede practicar tanto en solitario como en grupo, en los llamados coven o aquelarres.  Tanto de un modo como de otro se realizan rituales para pedir la fuerza  de los dioses para superar los problemas o para agradecer su ayuda o simplemente para celebrar las festividades wiccanas y honrar su significado.

El símbolo más representativo de la wicca es el pentáculo, o estrella de cinco puntas rodeado normalmente por un círculo.  Es un símbolo de protección que nada tiene que ver con el demonio como se cree erroneamente.

Creemos en la triple diosa, que son las tres etapas de la vida.  La doncella, la madre y la anciana.  También está asociado a las fases de la luna en una rueda cíclica.

No hay jerarquía en la wicca, todos los practicantes son sacerdotes o sacerdotisas.  Hay diferentes vertientes con algunas características especiales, pero todas se basan en lo mismo, el respeto a la naturaleza, la celebración de los cambios de estaciones, el paso del tiempo y la energía de los elementos.

A grandes rasgos éste es el significado de la wicca.  A partir de aquí iré ampliando la información de cada uno de sus aspectos. 

Bienvenidos al mundo de la magia!

Bienvenidos al interesante mundo de la magia natural.  

Este blog pretende introducir al lector en el fascinante mundo de la wicca y enseñarle los innumerables poderes ocultos de la naturaleza.  Aprender los recursos disponibles a nuestro alrededor, en lo profundo de un bosque o en un relajante lago.

También contará con un apartado de leyendas e historias cortas para introducirnos en un mundo imaginario que nos aleje momentaneamente de la realidad y haga volar la imaginación.